¿Y si existiera una manera de consumir gran cantidad de comida y aun así perder peso?

¡Sí existe!

Todo se trata de escoger los alimentos correctos para ayudarte a aplastar tu apetito. Aquí te dejo algunos de los mejores para ayudarte a lograrlo.

Canela

a canela ha sido llamada la “banda gástrica de la naturaleza”, gracias a su gran capacidad para suprimir el apetito.

En un estudio sobre la canela, se solicitó a los participantes añadir sólo 6 g de esta dulce especia en arroz con leche, en un intento por descubrir sus efectos sobre el apetito.

Se encontró que la canela ralentizó la absorción de carbohidratos desde el intestino delgado y los participantes se sintieron llenos durante más tiempo en comparación con aquellos que comieron sin canela.

Pimienta de cayena

Un estudio publicado en Nutrición Clínica investigó los efectos de la capsaicina, una sustancia importante en la pimienta de cayena, sobre el apetito.

Los investigadores encontraron que aquellos participantes que consumieron capsaicin con té verde experimentaron supresión de su hambre y mayor sentimiento de saciedad.

La capsaicina también tiene propiedades termo-genéticas, lo que significa que puede hacer aumentar la temperatura en tu cuerpo, mejorando el flujo sanguíneo y el metabolismo.

Además, agregar cualquier tipo de hierba o especias a tus comidas les da más sabor. Y las comidas que saben bien satisfacen más que las insulsas, dejándote más lleno y con menos oportunidades de comer de más.

Menta

Un estudio en 2007 por la Universidad Jesuita de Wheeling investigó los efectos de la hierbabuena en los niveles de hambre.

Sólo oler hierbabuena llevó a los participantes a comer ‘significativamente menos’ calorías totales, calorías de grasas saturadas, grasa total y azúcar.

También clasificaron sus niveles y dolores por hambre de manera significativamente menor en comparación con aquellos que no inhalaron la esencia de hierbabuena.

Prueba elaborar un té de hierbabuena, agregar unas hojitas de menta a tu bebida o unas gomas de mascar sabor a menta para mantener tu hambre al margen.

Manzanas

Un tipo de fibra soluble en las manzanas, llamada pectina, es el secreto del poder para saciar de esta fruta tan común.

La pectina reduce la cantidad de azúcar y calorías que son absorbidas al torrente sanguíneo después de la comida, previniendo subidones en los niveles de azúcar en la sangre que llevan a mayores acumulaciones de grasa e inevitables bajones de azúcar.

Aguacate

Muchos elaboradores de dietas temen a los aguacates, tomando como excusa su alto contenido graso. Pero si supieran lo saludable que pueden ser algunas grasas, enseguida adoptarían esta fruta.

Como parte de un estudio sobre los efectos del aguacate en la saciedad, se solicitó a veintiséis individuos con sobrepeso incorporar aguacates frescos en sus almuerzos, ya fuese reemplazando otro alimento o simplemente añadiéndolos.

Aquellos que añadieron los aguacates frescos a sus almuerzos tuvieron una disminución en sus deseos por meriendas en un 40% por un lapso de tres horas, mientras que a las cinco horas la disminución fue de 28%.

Si no sabes cuánto aguacate comer, te recomiendo seguir el ejemplo del estudio e incluir medio aguacate para obtener los beneficios completos.

Frijoles

Los frijoles son increíblemente ricos en fibras y proteínas lo que significa que te sentirás llenos por un largo período después de comerlos.

También ayudan a liberar una sustancia llamada colecistoquinina (CCK), una hormona digestiva que actúa como supresor natural del apetito. 

La CCK tiene un aproximamiento doble cuando se trata de reducción de apetito.

Provoca que la comida se mueva más lento a través de los intestinos, lo que te da la sensación de estar lleno durante más tiempo; también incrementa el nivel de dopamina en el cerebro, lo que aumenta el metabolismo y disminuye el hambre.

 

Chocolate oscuro

 

Buenas noticias para los amantes del chocolate – ¡puede ayudarte a comer menos!

Pero sólo si comes chocolate oscuro, que es conocido por sus grandiosos beneficios para la salud.

Un estudio sobre el chocolate blanco y el oscuro, y sus efectos en la azúcar en la sangre, encontraron que los participantes que comieron chocolate oscuro experimentaron niveles más bajos de azúcar en la sangre, algo que el Dr. OZ asegura es la clave para ayudarte a perder peso.

 

Los investigadores concluyeron que el chocolate oscuro promueve la saciedad y disminuye el deseo de comer.

 

Nueces

Las nueces contienen grasas saludables que ayudan a mantener bajo el colesterol, están llenas de fibra, que se digiere lentamente, y son fuente de proteínas – marcando todos los puntos para un alimento saciador.

En particular, prueba las almendras y los piñones.

Edamame

Media taza de edamame contiene sólo 95 calorías, pero más de 8 g de proteínas, significando que es una excelente opción para llenarte sin cargarte de calorías.

Se ha demostrado que las meriendas de soya ricas en proteínas mejoran el apetito, la saciedad y la calidad de la dieta en adolescentes, a la vez que mejoran su estado anímico y cognición.

Tomarte el tiempo para pelar el edamame también significa que demorarás más comiéndolos; lo que dará la oportunidad a tu cerebro de darse cuenta de que estás lleno.

 

Hojas verdes

Los vegetales de hojas verdes oscuras deberían estar incluidos en cualquier dieta balanceada. Ellos brindan mucho valor a la mesa en términos de antioxidantes y densidad de nutrientes.

 

Avena

La avena es uno de esos alimentos que simplemente resultan económicos y al mismo tiempo ayudan a matar el hambre.

Primero, está cargada en fibra, o sea que te hace sentir más lleno que los alimentos bajos en fibra.

Segundo, tiene índice glucémico bajo (IG), lo que significa que tendrás una lenta liberación de azúcar que te estará acompañando durante la tarde. Así evitar los bajones de azúcar y ataques de hambre.

Semillas de chía

Estas semillas son una asombrosa herramienta para perder peso. De hecho, son grandiosas por muchas razones.

Funcionan tan bien para perder peso porque están cargadas en líquido, se expanden y obtienen la consistencia de un gel. Es la misma razón por la que funcionan tan bien dentro de un budín saludable.

Semillas de lino

La semilla de lino es gran fuente del ácido graso esencial omega 3, con cada cucharada conteniendo alrededor de 1.8g de omega 3.

Se ha demostrado que el omega 3 puede ayudar a los que poseen una dieta a sentirse lleno más tiempo y comer menos.

Y para mejorarlo, la semilla de lino está llena de fibra.

Aceite de coco

El aceite de coco es mi aceite favorito para cocinar y agregar a batidos, café y aderezos para ensalada.

¿Qué hace a este aceite tropical tan diferente de los otros aceites?

Está formado por un gran porcentaje de ácidos grasos de cadena media (MCFA), contrarios a los ácidos de cadena larga (LCFA) encontrados en otros aceites de cocina.

Vinagre de sidra de manzana

El vinagre de sidra de manzana es otra de las celebridades cuando se trata de pérdida de peso y salud en general.

Es uno de mis favoritos también. No solamente suprime el apetito, además puede ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre.

Café

Si alguna vez has leído sobre los beneficios del café, debes saber que es un quemador de grasas y acelerador del metabolismo muy efectivo.

Es también un gran supresor del apetito con estudios mostrando que una taza de café puede prevenir tus deseos de comer a corto plazo.

Y recuerda que sólo el café negro te ayudará a perder peso. Si estás bebiendo café con leche o cargado de azúcar entonces podrías estar consumiendo hasta 400 calorías con cada bebida.

Agua

El H2O es una de las maneras más simples y naturales en que puedes nutrir tu cuerpo. Es vital para el funcionamiento saludable de todo, desde los riñones y corazón hasta nuestra piel y cerebro.

A veces nuestros cuerpos piensan que están hambrientos, cuando en realidad necesitan hidratarse. La próxima vez que sientas hambre, prueba uno o dos vasos de agua primero y fíjate si con eso basta.

Té verde

El té verde también incrementa la liberación de CCK (la misma hormona que se libera por los frijoles y piñones) que notifica a nuestro cerebro de nuestro cuerpo lleno. Ahora es fácil ver por qué el té verde te llena – ¡te está diciendo que estás lleno!

Otra manera en que el té verde puede estar ayudándote de forma indirecta a controlar tu apetito es evitando que comas de manera emocional.

 

 

 

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